Empresa busca promover el desarrollo en este nivel de atención para mejorar accesos a la medicina
Santo Domingo. República Dominicana. Radiografía Al Día.– El sistema de salud de República Dominicana se enfrenta un desafío significativo: el gasto de bolsillo de los pacientes es alto. De acuerdo con un estudio conjunto de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y el Grupo del Banco Mundial, el promedio de gasto de bolsillo en los países de América Latina y el Caribe es del 34% del gasto total en salud.
Sin embargo, para la población de la media isla este porcentaje asciende al 45%, colocándose entre los diez países con peores cifras en este ámbito.
El gasto promedio dedicado a la adquisición de bienes y servicios de salud se estima en RD$2,596.0 mensuales por hogar, lo que representa un 6.81% del Gasto Corriente. De este monto, RD$1,310.3 mensuales por hogar (50.5%) corresponden a gasto de bolsillo en salud (GBS), equivalente a un 3.9% del gasto de consumo final efectivo.
En ese sentido, recientemente llegaron al país el equipo de Sanitas, en busca de reducir el alto gasto de bolsillo que enfrentan los pacientes dominicanos, así como impulsar una atención más eficiente.
Estrategias
Esta empresa ha llegado a República Dominicana con una misión clara: reducir este gasto de bolsillo a través de un modelo centrado en la atención primaria y preventiva. “El modelo de Sanitas busca precisamente disminuir el gasto de bolsillo del paciente”, explicó y Sergio Martínez, líder regional de la empresa.
La clave de este enfoque radica en la asignación de un médico de cabecera o familiar que pueda resolver la mayoría de las necesidades de salud del paciente, evitando así consultas innecesarias con múltiples especialistas. Este enfoque no solo reduce costos, sino que también mejora la eficiencia y la calidad del cuidado médico al tener una historia clínica centralizada y sistematizada.
Recientemente, Sanitas ha inaugurado dos centros de atención primaria ubicados en la avenida 27 de Febrero y en San Isidro. Estos centros están diseñados para ofrecer una atención integral, manejando mejores precios y optimizando la resolutividad en el mismo lugar, lo que minimiza los costos adicionales para los pacientes. “El objetivo de nuestros centros es ofrecer una atención integral y más económica para el dominicano”, afirmó Martínez.
Reducción del desperdicio en salud
Uno de los problemas más críticos del sistema de salud actual es el desperdicio en salud, el cual incluye la repetición de pruebas innecesarias y la falta de coordinación en el cuidado del paciente. En muchos casos, cuando un paciente llega a una sala de urgencias, se le realizan múltiples exámenes de laboratorio y puede pasar tiempo en observación sin que sea estrictamente necesario, lo cual incrementa significativamente los costos.
“El objetivo de nuestros centros es ofrecer una atención integral y más económica para el dominicano”, destacó Martínez. Al contar con un equipo de salud que conoce al paciente y mantiene una historia clínica detallada, se evita la duplicación de pruebas y se mejora la gestión del cuidado, permitiendo un diagnóstico y tratamiento más eficientes.
Sanitas también se enfoca en la promoción de hábitos saludables para reducir la dependencia de medicamentos costosos a largo plazo. “Nuestro enfoque está muy basado en cambiar hábitos de salud, lo que permite controlar patologías como la diabetes con medicamentos de primera línea”, explicó Martínez.
Esto no solo mejora la salud del paciente, sino que también reduce los costos de los tratamientos a largo plazo. La prevención y el manejo adecuado de enfermedades crónicas pueden reducir significativamente el gasto en medicamentos y tratamientos complejos.
El modelo de Sanitas en República Dominicana tiene similitudes con el sistema implementado en Colombia, donde la atención primaria es fundamental para la eficiencia del sistema de salud. En Colombia, tener un médico de cabecera que oriente al paciente y gestione su cuidado ha demostrado ser efectivo en reducir costos y mejorar los resultados en salud. Este modelo es especialmente relevante para República Dominicana, donde los pacientes pueden consultar a cualquier profesional sin una guía clara, lo que a menudo resulta en tratamientos fragmentados y costosos.
“En República Dominicana, no vemos un sistema donde alguien se responsabilice del cuidado continuo del paciente. Queremos resolver eso”, indicó Martínez. La atención primaria efectiva no solo proporciona un diagnóstico oportuno y tratamiento adecuado, sino que también construye una relación de confianza entre el paciente y el equipo de salud, lo cual es crucial para el manejo continuo y efectivo de la salud.
Proyecciones
Sanitas no descarta la posibilidad de expandir sus servicios en el futuro, incluyendo la apertura de instituciones hospitalarias. Sin embargo, su enfoque actual está en invertir en centros ambulatorios que puedan resolver la mayoría de los problemas de salud de manera eficiente y económica. Esta estrategia permite un acceso más amplio y asequible a los servicios de salud, reduciendo así la necesidad de hospitalizaciones costosas y prolongadas.
“Nuestro objetivo es resolver la mayoría de los problemas de salud en un entorno ambulatorio, lo cual es más económico y conveniente para el paciente”, explicó Martínez. Esta estrategia está alineada con las tendencias globales de salud, que favorecen la atención primaria y ambulatoria como medios para mejorar la eficiencia y reducir costos.
Al reducir el gasto de bolsillo, mejorar la coordinación del cuidado y promover hábitos saludables, la empresa busca posicionarse como un aliado clave para los pacientes dominicanos.
“Estamos comprometidos con la mejora de la salud y el bienestar de los dominicanos, ofreciendo un modelo de atención integral y accesible”, concluyó Martínez. Este compromiso no solo tiene implicaciones positivas para los pacientes individuales, sino que también puede contribuir a la sostenibilidad y eficiencia del sistema de salud en su conjunto.
Este enfoque integral no solo aborda los problemas inmediatos del gasto de bolsillo, sino que también sienta las bases para un sistema de salud más eficiente y sostenible a largo plazo.